Pescado: rico en ácidos omega-3 y omega-6, que protegen el corazón, mejoran tu piel y evitan el acné, reduce la inflamacón en el organismo, hace que las celulas ipan los poros y además ataca el colágeno.
Ajo y cebolla: ayudan al hígado a eliminar toxinas y carcinógenos.
Frijoles: al igual que las frutas y los vegetales, son ricos en antioxidantes, ácido fólico y potasio, esenciales para combatir los radicales libres.
Aceite de oliva: alejarse de las grasas saturadas, pero incorporar las no saturadas para absover bien las vitaminas.
Nueces: un puñado cada día, carga de ácidos omega-3, sin sal.
fuente: cosmopolitan
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