UNA GRANADA PARA RIVER PLATE, Juan Pablo Meneses

El polaco aparece mostrando su chapluma, como le dice cariñosamente a su cuchilla.está rodeado de cinco barristas que lo siguen como alumnos. Sin aviso previo, el Polaco deja atodos boquiabiertos con su buen majeo de navaja:en un minuto desatornilla los cuatro pernos que sujetan el tablero donde va la luz de lectura y la salida de aire correspondiente a los asientos 31 y 32. Ante la mirada desconcertada (y cobarde según él) de quienes por primera vez viajamos con la barra, el Polaco desmonta el armazón del techo hasta dejar todo a la vista. Todo, en este caso, se refiere a un conjunto de cables internos que comúnmente permanecen escondidos a los pasajeros. Ocultos y relegados, como muchos barristas dicen sentrise frente a la sociedad.
-Antes de esconderla hay quie envolverla en algo...Necesitamos un gorro-dice el Polaco, y uno de sus secuaces le quita la gorra a un barrista primerizo.
-Aquì hay que ayudar compadre-es la frase que refriegan en la cara de un muchacho, que tímidamente, ve cómo su prenda azul se pierde entre tantas manos veinteañeras.
el Polaco envuelve cuidadosamente la granada en el sombrerito que luce una U. Sí, una granada.Un explosivo de combate. Acá adentro llevamos una bomba en miniatura. Se trata de una munición real que según se comenta dentro del autobús, alguien se la robó a los milicos mientras hacía el servicio militar.
-Estas son super fáciles de lanzar.Hay que apretar este gancho, sacarle el seguro con los dientes y lanzarla(...)Todo para salir por primera vez fuera del país, en un hogar cada vez más lejano, con la hinchada de los amores.
-Ni cagando nos cachan en la aduana, peor la tranquilidad no vuelve a este Chilebus, cuando el bus avanza repleto de hinchas. pero surge ¿quien la va a alanzar?...ahora vamos a ver quien es el más guapo, quén es valiente de verdad ¿o acaso en las barras hay puras mamás?
por suerte la decisión queda incoclusa, (...)Llega una botella de pisco y le sigue uan caja de vino tinto y unas picaditas de marihuana(...)
. si es necesario morir en Argentina por el equipo, no queda otra, alguien va a delante y pone una cinta de Rage Against the Machine, banda estadounidense que se toma el poder del Chilebus(...)
El tema del explosivo a ratos se olvida, pero pronto vuelve, el fotógrafo que viene conmigo, me mira con ojos igualmente inyectados y me susurra: si se enteran que andamos haciendo un reportaje, nos matan.
Nuestro bus es el número 3, de los 11 que salieron esta mañana de la sede de la Corporación de Fútbol de la Universidad de Chile.Vamos a Argentina a alentar al equipo en su partido por las semifinales de la copa libertadores de América.
-Vamos a morir!. Viajamos los de abajo, la hinchada más brava del país.(...)
arriba del bus el futuro no existe, nadie sabe que el jefe máximo de la barra Walter, morirá años más tarde a causa de los golpes que recibió allá en la cabeza, ni que el Krammer asumirá el control de la barra y que al poco tiempo tendrá al grupo dividido, que se aprovechará económicamente de la barra y que luego será arrestado por golpear a una señora en un almacén y finalmente esposado y encarcelado por pertenecer a una banda de asaltantes.Nadie sospecha que después de este viaje la U nunca má volverá a pasar de la primera ronda de la copa libertadores ni que este viaje será el más memorable para los chunchos. Sólo importa el ahora...

me cansé de escribir, la historia sigue, es muy entretenida, a los pobres hinchas les sacan la mierda los policías argentinos,pierden el partido, no lanzan la granada, pero de todas formas, vuelven como héroes.